Seres EsTeLares
Nació en la Isla Canaria que usa el silbido para interactuar desde tiempo inmemorial.
Jugaba entre acantilados y barrancos, con cabras y pájaros, acompañado por el lenguaje del viento y su naturaleza particular; entre riscos y veredas, aprendió a observar sin ofrecer resistencia a lo que es, para asimilar la paz de cada ocasión.
Sabe que un nuevo tiempo comienza, se lo dice el viento, que le silba al oído en tono familiar.