SÍ senTidO
Normalizar el sinsentido trae caos a la mentalidad.
El desorden mental aumenta con la práctica habitual de etiquetar como «suerte y/o casualidad», los resultados favorables que la razón no puede explicar y como «infortunio y/o calamidad» la adversidad a afrontar.
Las vivencias resultan manejables, cuando hay serenidad para observar la función que cumplen en la vida de cada cual.